De pronto estaba sentada en una oficina haciendo cosas totalmente distintas a las que sabia y solia hacer junto a un jarro de te verde que había reemplazado a mi bien amado café pero que en ese momento tenia el mismo sabor a gloria. Mientras me encontraba en el proceso de investigación y aprendizaje de este nuevo empleo encontré un par de claves para el éxito en mi vida que hasta hoy están funcionando de maravilla, pero esa es otra historia. Descubri lo importante que es intentar por lo menos, buscar el equilibrio entre dos cosas: el corazón y la persona, buscar la forma de equilibrar por separado a las dos partes para que por algo que yo llamo consecuencia cósmica cada cual por su lado funcione correctamente.
De pronto dejé de escribir mis historias con lápiz y las hacia con esfero, con el tiempo los tachones disminuyeron y empece a creer que podía ser un síntoma de que el juicio me alcanzaba que tal vez eso significaba que ahora me tomo un poco mas de tiempo para pensar mejor las cosas y que ya había dejado de lanzar las palabras desde el estomago.
De pronto me vi envuelta en un gran reto crecer profesionalmente y no podía rechazarlo, no era ético no era algo que yo haría y entonces me sentí muy feliz por mi trabajo, pero a mi corazón lo había dejado olvidado en el camino algún tiempo atrás tanto que ya poco me importaba si aquel alguien seguía ahí, me tenia sin cuidado la existencia de una persona a la que algún dia decidi amar pero entonces mi corazón aunque olvidado se sentía feliz porque de pronto se vio rodeado de personas para las que era importante, que mostraban admiración y aprecio por aquella persona en la que de pronto me había convertido . De pronto aquellas personas a las que consideraba “fuera de mi liga” se confesaban conmigo y me hacían parte de sus vidas. De pronto comprobé que el dinero puede comprar muchas cosas pero el valor, el coraje para luchar y trabajar duro por aquello que tanto se quiere, aquello que el dinero puede comprar y que te permita vivir mejor. Despues de todo y al final del día, de pronto me vino a la mente: mi corazón y mi trabajo me dijeron hoy que ya estoy grande.
No hay comentarios:
Publicar un comentario